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(II Parte)
Terminología, características y definición de la narración oral.
Por lo anteriormente expuesto, vale la pena señalar lo que González y Yánez (Ob. Cit.) precisan como terminología, características y definición de la narración oral. Respecto a la terminología precisan que:
Cuentero: Es una persona que inventa sus propias historias y recrea las que le llegan por tradición oral.
Características del cuentero:
Ingenuo.
Sin metodología definida.
Artista que debe ser respetado.
Sabio creador, capaz de inventar las historias que le llegan por tradición oral y de inventar las suyas.
Mantiene viva la tradición oral, la sensibilidad entre la gente y el gusto por la palabra.
Vinculados a comunidades que aún conservan los valores y tradiciones de los ancestros.
Su memorización es mucho más cercana a la improvisación, a la recreación.
El cuentero puede aparecer como protagonista de lo que cuenta: en ese caso ya tiene un peso esencial, él es el personaje principal de lo que cuenta.
Existen cuentos donde la exageración juega un papel muy importante, mentiras como verdades y donde la verdad del cuento en su momento de contar es tan importante como la verdad histórica.
No se puede ser cuentero sino se cree que lo que se cuenta es verdad por imposible que parezca. Así para Sawyer (s/f):
“Para narrar bien hay que estar gloriosamente vivo, ya que no puede
encender el fuego, con la leña mojada”. (pág.20)
Narrador oral o cuenta cuentos: Es la persona que cuenta desde el conocimiento de una técnica a partir de una metodología con objetivos muy precisos. Posee cierto grado de instrucción.
La narración oral:
Es un oficio en sí mismo, una manera válida de ser y comunicar tan importante como el teatro y la danza.
Es uno de los oficios más comunicativos que existe: implica una comunicación directa, profunda, posee la cualidad de tener en el encuentro con el público a la persona viva, cercana.
Cada presentación del narrador oral es irrepetible, existe porque el público está allí.
Hay que tomar decisiones apelando más al sentido común que a un conjunto de normas y reglas preestablecidas.
Contar es re-contar la voz de los sueños, contar es amar, es un acto profundamente solidario, a partir de los ojos, de las expresiones del público.
Definición del oficio:
Ser cuidados para no confundirse con un charlatán.
Tener gran dignidad. Cuidar su imagen pública.
Muy explicativo hacia los que no son conocedores.
El contexto juega un papel decisivo.
Cualidades inherentes: sensibilidad, capacidad de reflexión y sentido común.
Narrar significa una preparación cuidadosa, comprometida.
El respeto que te tienen comienza con el que te tienes y le tienes al público.
Esquema para la técnica de la narración oral.
Conocer la importancia de su oficio y sus antecedentes.
Conocer al público.
Presencia viva del que narra y para qué narra: comunicación humana.
Cuidar la relación entre el público y el narrador.
Prever al público al cual se la va a contar.
Adaptar los cuentos según las edades: para adolescentes, por ejemplo, es fatal un cuento de hadas.
Ser muy buenos observadores.
Para un público trashumante: cuentos breves.
No es lo mismo la Universidad que una plaza pública, un sitio abierto que uno cerrado.
Hay cuentos que son para todos los públicos, otros para un tipo determinado. Los cuentos del folklore son para todas las edades.
Bibliografía:
1.- Enciclopedia Universal Ilustrada Europea Americana. Espasa – Calpe S. A. Madrid, 1908. Tomo III. P.4.
2.-Ramón Menéndez Pidal. Poesía juglarezca y juglares. Espasa – Calpe. Editorial Colec Austral, 1962 p.12.
3.- JanVansina. “La tradición y su metodología”. Historia General de África. Tecno Unesco. 1982 p. 161.
4.- A. Hampaté Ba. “La tradición viviente” En: Historia General de África. Tecno Unesco. 1982 p. 161.Tecno Unesco. 1982 p. 219
5.- Ruth Sawyer. “La narración de cuentos: un arte popular”. En: Teoría y técnicas del arte de narrar. Dpto. de Literatura y narraciones infantiles. Biblioteca Nacional “José Marti”. s/f p 20
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